jueves, 24 de mayo de 2007

caracoles

Oh caracol, gordito y jugoso, de los moluscos el más cariñoso. Tú que bajo el influjo de la luna creciente haces cambiar los planes de la gente. A mí que ayer moría por un cuento, me obnubilaste con tu presencia y acudí a tu llamamiento. Tú que en las noches albaicineras sales en un platito bañado en una piscina de líquido picantito. Tú que en la plaza Aliatar acompañas la cerveza deja que te diga una cosa que me ronda por la cabeza. Oh sabroso alimento, te quiero desde que era pequeña sin remordimiento. Tú que en tardes de románticas termas alegras a la gente enferma. Aunque tu cáscara horrorice a los suecos no te cambiamos por un viaje a Marruecos. Ansiosa estoy de volver a comerte, darle un beso sonoro al caracol de la suerte.

4 comentarios:

Neikos dijo...

Es un gordito bueno, lalalá,
La pinta es lo de menos, lalalá.

Yo personalmente prefiero los ibéricos de mis vecinos, ¡dónde va a parar!

Anónimo dijo...

Los caracoles tienen babas...
Prefiero una oda a las termas y a la vida de jubileta que llevan algunos un día cualquiera...
Si la envidia fuera caracol...
cuanta baba
cuanta...
puajjjj.

Anónimo dijo...

mediocre oda...pero bueno...se te perdona por ser tu y por ser como eres de maja aunque de linier tengas tanta mala ostia como para irte directa al público y pegarles cuatro gritos (y eso que un linier no puede hablar)!!! El primer viernes de Junio maratón de cuentos en la plaza del 8 quiero que todos os prepareis un cuentecito pa contar!!! besacos

Anónimo dijo...

puajjjj, puajjj, puajjjj